3.11.07

Mis series favoritas: Expediente X

No voy a hacer ningún resumen de la serie, ni a reseñarla, ni siquiera voy a criticarla. Voy a contar lo que significó expediente X para mí.

Sin duda, la serie de mi adolescencia fue Expediente X. Cuando se estrenó yo era una niña de once años impresionable y ya con unas fuertes tendencias al frikismo (supongo que es producto de mi genética y el ambiente familiar). Por supuesto, mis padres no me la dejaban ver porque la consideraban una serie de terror que podía afectar mi tierna mente infantil. Sin embargo, no podía luchar contra la fascinación que me producía su atmósfera oscura e inquietante y usaba todas mis estratagemas para poder verla (aunque fuese a trozos): esconderme detrás del sofá hasta ser descubierta, levantarme para hacer pipí cada 10 minutos, pedir agua cada 15, preguntar idioteces...

Por fin mis padres cedieron y me gravaban la serie para que yo la pudiese ver en un mejor horario sin perder horas de sueño. Y con eso, logré tener registrada y catalogada en VHS la mayor parte de los capítulos que revisionaba una y otra vez a todas horas.

Quizá el frikismo no hubiese llegado a más, si por esos tiempos no hubiese llegado a mi casa Internet. Aún éramos pocos los que usábamos este medio de comunicación y eran muy populares los grupos de noticias y los grupos de correo. De esa forma empecé a engancharme a leer noticias casi diarias de la serie, spoilers, teorías de conspiraciones, rumores... Todo un mundo a mi alcance... y tan poco el tiempo que me dejaban mis padres conectarme (recordemos que en estos momentos debía tener unos 13 o 14 años y no existía la tarifa plana... así que cada minuto era oro).

Posteriormente, nacieron las primeras webs de referencia de la serie como la siempre recordada y ya cerrada silverbug-x-files.com. Esta Web era el templo de Expediente X en español. Tenía centenas de archivos de audio wav extraídos de la serie en VO, que yo me guardaba en una cinta, y en los viajes en coche los escuchaba para recordar esos momentos shippers fantásticos (shipper: a favor de una relación sexual resuelta entre Mulder&Scully. Lo opuesto era Noromos, no-romance). También poseía una sección de fanfictions en la que me inicié como escritora de relatos con bastante buena acogida... relatos en su mayoría bastante ñoños que hoy me hacen sonrojar. También había los fan-arts, llenos de collages, cómics y dibujos de los protagonistas que yo guardaba en mi disco duro para verlos una y otra vez. Y un gran foro, que era el centro neurálgico del fenómeno x-philo (aquí es donde inventé mi nick kashna... así que mi alter-ego en Internet ya tiene 10 años :)


El momento de mayor éxito de la serie, fue el estreno de la película en el verano del 98. La película si mal no recuerdo, la fui a ver con mis amigos, luego con mis padres y otra vez sola. Y durante un corto periodo de tiempo me volví importante ya que se volvió una serie popular y yo conocía todos los secretos de la serie. Sin embargo, mi momento de gloria pasó cuando pasó la moda de decir que te gustaba la serie.

Durante estos años de militancia... llevé media melena pelirroja como Scully y mi habitación estaba forrada de pósters, fotos, recortes de revista y periódicos de la serie y la película. Des de la distancia, debo reconocer que no era una habitación demasiado acogedora.

En el 99, aprovechando que íbamos de vacaciones al Norte de España (Cantabria, Asturias...)... conseguí que nos acercásemos a Madrid para poder asistir a una kdd con unos cuantos x-philos de la capital. (remarcar la ironía de decir: ya que vamos de Barcelona a Cantabria... pasemos por Madrid. Así que imaginad lo pesada que me debí poner para que mis padres introdugeran ese pequeño cambio en la ruta prevista) Mi única kdd!! Tengo muy buenos recuerdos en foto y en forma de camiseta.

Y de esta forma fui devota de la serie hasta que en el 2000 David Duchovny decidió dejar la serie, Chris Carter complicó la trama hasta límites absurdos y metió en el casting principal a los dos actores con menos feeling del universo conocido. A muchos nos rompió el corazón, porque sabíamos que eso significaba el final. Y como no estaba dispuesta a que me destrozasen más la serie, la dejé igual que te desintoxicas de una droga. De golpe y porrazo. Así que desconecté de todo ese mundo, y decidí volcarme en otro objeto del deseo (en este caso fue Harry Potter)


Aún así, siempre queda esa nostalgia por el pasado... hace poco vi las 4 temporadas de Expediente x que me faltan en DVD (por supuesto, no cuento las avorrecibles 8a y 9a temporada que no tengo ningún interés en conocer) por 30 euros. Así que es posible que algún día decoren mi salón.